miércoles, 29 de junio de 2016

TENGO UNA CIRUGÍA PREVIA EN MIS PECHOS ¿PODRÉ AMAMANTAR?

Existen diferentes procedimientos quirúrgicos por los que una mujer puede haber pasado antes de convertirse en madre, y la preocupación porque esto pueda afectar su capacidad de amamantar es frecuente.
Lo más probable es que pueda hacerlo sin problema, depende del tipo de cirugía y de la incisión que se haya realizado.

1) Mastectomía: Si se ha tenido una resección completa del pecho de un lado, la mamá podrá amamantar con el pecho sano, un solo pecho es suficiente para cubrir los requerimientos del bebé.

2) Resección de alguna tumoración: lo más seguro es que no haya problema, a menos de que la tumoración estuviera localizada en el área inferior externa del pecho, cerca de la areola, en ese caso sólo se requerirá revisar que haya un buen reflejo de eyección (bajada) de la leche.

3) Implantes mamarios: En este caso no suele haber problema ya que el tejido mamario es respetado, a menos de que la incisión para colocarlos haya sido subareolar, si este fuera el caso, hay que revisar que haya un buen reflejo de bajada de la leche. A mayor tiempo que haya pasado desde la cirugía, la probabilidad de una complicación será menor. Otras incisiones como axilar o inframamaria (por debajo del pecho) no representan problema alguno. En estos casos las mamás solo notarán que sus pechos se sienten “muy llenos” como si estuvieran congestionados constantemente debido a la disminución del espacio, solo habrá que tener la precaución de no permitir que la leche se acumule durante períodos largos de tiempo. A medida que la lactancia avance esa incomodidad dejará de percibirse.

4) Reducción mamaria: En el caso si podemos tener dificultades en la producción de leche ya que se remueve tejido mamario, se cortan conductos y se secciona totalmente la areola para recolocarla, esto implica un corte total de la inervación de la areola que es la que lleva el estímulo hacia el cerebro (hipófisis) para que se libere la hormona oxitocina y se expulse la leche. En la mayoría de los casos las madres tienen producción, pero requerirán suplementar para poder alimentar en forma suficiente a su bebé. Un suplementador de largo plazo ayuda a simplificar esta tarea, el bebé toma la leche directamente al pecho recibiendo leche materna y leche de fórmula. Es el método mediante el cual puede mantenerse la lactancia durante el tiempo que la mamá desee sin afectar la producción de leche materna.

En todas estas situaciones lo recomendable es recibir apoyo de un profesional de lactancia, esto le permitirá a la madre conocer cuál es su situación y saber qué esperar respecto a la lactancia. Si existe la posibilidad de tener una baja producción de leche pueden tomarse las medidas necesarias para que mamá y bebé puedan disfrutar de su lactancia sin poner en riesgo la salud ninguno de ellos. 

Dra. Aurelia Flores
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